El escritorio de Manuel Talens

El traductor activista

Socialismo nacional frente a capitalismo global

El caso de Amir Peretz

Gilad Atzmon (fotografía de David Foreman)

Gilad Atzmon *

Traducido para Rebeli�n por Germ�n Leyens y Manuel Talens

La reciente elecci�n de Amir Peretz como presidente del Partido Laborista israel� es mucho m�s significativa de lo que muchos comentaristas parecen dispuestos a admitir. Por primera vez, el Partido Laborista israel� est� dirigido por un l�der verdaderamente fogoso de la clase trabajadora. Peretz es un hombre relativamente joven que creci� en una vivienda de protecci�n estatal de Sderot, un barrio pobre al sur de Israel construido especialmente para jud�os de origen �rabe en los a�os cincuenta. En aquella �poca, la elite jud�a asquenaz� no pod�a tolerar la idea de que los jud�os de ese origen inundaran sus reci�n erigidas metr�polis europeas. La mayor�a de los jud�os de origen �rabe no llegaron a formar parte del paisaje demogr�fico israel� hasta despu�s de la fundaci�n del Estado jud�o. Se los transport� a Israel en una operaci�n de �xodo masivo, que a menudo fue forzada. La idea subyacente a dicha operaci�n era la necesidad de reforzar la mayor�a de la poblaci�n jud�a de manera que excediese en n�mero a la parte de la poblaci�n palestina que se neg� a huir en 1948. Una vez instalados en Israel, los jud�os de origen �rabe recibieron un trato bastante malo. A su llegada sintieron de inmediato la pesada mano de la discriminaci�n supremacista asquenaz�. �stos se deshicieron de la mayor�a de los nuevos inmigrantes instal�ndolos en viviendas econ�micas subvencionadas en el desierto del Negev y en otras regiones poco atractivas. Su funci�n era servir la causa sionista, ya fuese como mano de obra barata o simplemente como un escudo humano entre las emergentes ciudades jud�as europeas y los �rabes hostiles en el otro lado.

Peretz creci� en Sderot y, en los a�os ochenta, lleg� a ser alcalde de la ciudad. En 1995 fue elegido jefe del Histadrut, la principal organizaci�n sindical de Israel. Hace unos d�as acaba de instalarse en centro del escenario pol�tico israel�, tras desplazar a Shimon Peres, el sempiterno y m�s derrotado pol�tico de la historia actual.

La aparici�n de Amir Peretz es una revoluci�n tan incalculable que Sharon y el partido Likud est�n en un verdadero estado de p�nico. Pero no s�lo el Likud. Shas, el partido ortodoxo sefard�, tambi�n est� muy preocupado. Por primera vez, un sefard� laico dirige uno de los dos principales partidos. Adem�s, se trata de un hombre de a pie, no de un heroico general del ej�rcito israel�. No es un ex asesino Amir Peretzdel Mossad ni tiene sus manos manchadas de sangre �rabe. No ha adoptado una ensoberbecida jerga asquenaz�. No fue nombrado por un pol�tico asquenaz� como cebo pol�tico para atraer a los jud�os de origen �rabe. Es un simple israel� que ha logrado dominar el segundo mayor partido nacional por derecho propio, y es un jud�o de origen �rabe.

Peretz naci� en Marruecos. Ten�a cuatro a�os cuando lleg� a Israel. Nunca ha negado su origen ni tratado de asimilarse al mundo asquenaz� de Israel. Me permito arg�ir que, si a�n existe la m�s remota esperanza de integrar a los jud�os en la regi�n, un hombre como Peretz podr�a hacerlo posible. Un hombre como Peretz, que es de origen �rabe, puede tratar con respeto a sus vecinos. En lugar del sue�o global de Shimon Peres de un �nuevo Oriente Pr�ximo�, en el que Israel proporcione riqueza a los �rabes �inferiores�, el mensaje de Amir Peretz al pueblo israel� es bastante simple y mucho menos pomposo: una vez que hagamos frente a nuestros problemas sociales, estaremos listos para hablar de paz con nuestros vecinos. En realidad, ese mensaje es m�s profundo que cualquier otro manifiesto pol�tico israel� que me pueda venir a la memoria. Para empezar, es genuino. Por primera vez, un pol�tico israel� considera la paz como un significante con sentido, no como un eslogan vac�o. Por primera vez, un pol�tico israel� se niega a pronunciar la palabra �shalom� s�lo por el gusto de pronunciarla. Pero el mensaje de Peretz no s�lo es aut�ntico, tambi�n puede ser un mensaje destinado a la comunidad europea: ya est� bien de capitalismo global. En vez de servir a la pol�tica de los grandes negocios, traten de ocuparse de su patio trasero. Puede que este mensaje le sirva de ayuda a la confusa izquierda francesa en la resoluci�n de su crisis actual. A menos que introduzcamos alguna justicia social en nuestro discurso nacional, Europa va a convertirse en un infierno. No olvidemos que, para muchos, ya es un infierno.

El mensaje de Peretz no surge del azar. El deterioro moral de Israel est� muy por delante del de Europa. En su calidad de estado americanizado, ha estado sufriendo durante muchos a�os el impacto de la pol�tica global. Israel, ubicado en la l�nea de frente del denominado �choque cultural�, es el lugar donde el Este se encuentra con el Oeste. Donde el colonialista se encuentra con el oprimido colonizado. Donde el negro se encuentra con el blanco. Israel es el dolor que el colonialismo occidental dispers� en el mundo �rabe. Los israel�es son los ocupantes pero, al mismo tiempo, tambi�n son los primeros en sufrir por ser los portadores de pol�ticas condenadas al fracaso.

La sociedad israel� se deshace bajo el peso de muchos intereses enfrentados. Por una parte, se perciben las huellas liberales occidentales del capitalismo puro y duro y de la privatizaci�n. La econom�a israel� est� controlada por grandes empresas, que han conducido a una sociedad obsesionada con el consumismo. Por la otra, se observa una distancia econ�mica cada vez mayor entre ricos y pobres, lo cual ha dado lugar a graves alteraciones sociales. La ascensi�n de Peretz es una reacci�n directa al capitalismo global. El h�roe surgido de la base es, al parecer, la mejor respuesta al enemigo an�nimo global.

Lo que puede convertir a Amir Peretz en el pr�ximo primer ministro de Israel es el capitalismo duro y los intereses globales. Est� claro que la �nica manera de luchar contra el capitalismo global es en los frentes local y social. Eso es lo que el Partido Laborista israel� ha decidido hacer. Con mucho sentido com�n, se ha quitado de encima al viejo globalizador Peres para elegir a un hombre del pueblo. En las pr�ximas elecciones, el pueblo israel� tendr� que escoger entre la dif�cil opci�n capitalista del notorio Netanyahu y el llamamiento a la transformaci�n social y a la igualdad que les ofrece Peretz.

Me permito asumir que a eso es adonde se dirige Europa. La turbulencia en los bancos traseros del Labour Party, que dio lugar a la derrota de Blair en la C�mara de los Comunes hace menos que una semana, indica que son las preocupaciones locales las que eventualmente derribar�n a Blair, no sus numerosos cr�menes de guerra en Irak. A menos que Francia adopte una sincera actitud social, se dirige a una guerra civil. Si la izquierda parlamentaria europea est� interesada en salvarse a s� misma, as� como a Europa, de una derrota completa ante los valores estadounidenses de la avaricia y el egotismo radical, puede que le interese estar atenta a los movimientos que haga Peretz en los pr�ximos meses. El �nico camino que le queda a la izquierda europea si desea sobrevivir en estos condenados tiempos consiste en alejarse de inmediato de la pol�tica de los grandes negocios y en adoptar una estrategia social que responda al discurso local y a las circunstancias de lo que a�n queda del estado nacional.

23 de noviembre de 2005

* Gilad Atzmon es jazzman y escritor brit�nico de origen israel�.

 


 

SI DESEA LEER EL TEXTO EN EL SITIO WEB DE REBELI�N, PULSE EN LA IMAGEN

Rebelión

 

Gilad Atzmon en espa�ol

Pulse para volver a la página anterior

 
 

Copyleft

Manuel Talens 2005