El escritorio de Manuel Talens

 

Vigencia de la utop�a

José Giménez Corbatón

por Jos� Gim�nez Corbat�n

  Portada de La cinta de Moebius

La cinta de Moebius
Alcal� Grupo Editorial (2007)
190 p�gs.

 

Cualquier enciclopedia, la Larousse por ejemplo, proporciona un par de acepciones de �utop�a� que convienen a la novela de Manuel Talens que hoy recomiendo: �Plan ideal de gobierno, en el que todo est� perfectamente determinado�. Y �cualquier plan o sistema bueno y halag�e�o, pero irrealizable�. Claro que, tambi�n podemos toparnos con una apostilla a ambas definiciones, seg�n la cual ese proyecto irrealizable, imaginario, exige una revalorizaci�n cr�tica que plantee un horizonte de superaci�n al l�mite de las posibilidades humanas. La utop�a puede no hallarse en parte alguna, pero no por ello debe dejar de ser una aspiraci�n ineludible.

Manuel Talens sit�a su �ltima novela en un lugar imaginario que es el cielo cristiano: como decir en ning�n sitio. Y su h�roe es nada menos que el Arc�ngel San Gabriel, el mismo que anunci� a Mar�a la concepci�n del hijo de Dios, del Verbo, destinado a redimirnos del pecado original que se narra en el G�nesis. Ahora bien, ese pecado original fue causado por un error del propio Dios a la hora de disponer las cosas de la Creaci�n y decirle a los hombres: �Fructificad y multiplicaos, llenad la tierra y sojuzgadla, y se�orear en los peces del mar, en las aves de los cielos, y en todas las bestias que se mueven sobre la tierra�. �Qu� fue eso �se pregunta Giordano Bruno en �La cinta de Moebius�- �sino una absurda y ambigua orden divina, el visto bueno de Dios para que algunos hombres se arrogasen el derecho a poseer por s� solos lo que en buena ley hubiese debido ser de todos? En otras palabras, Dios cre� al mismo tiempo el pecado y al pecador�.

No es extra�o pues que un Dios tan torpe delegue su poder en una jaur�a de Papas de la Iglesia romana y acabe enfermo de Alzheimer y reducido a vida vegetativa. En el cielo de Talens se reproduce la misma lucha de clases que Marx predijo y analiz� en la Tierra, y ese enfrentamiento, paralelo al que protagonizamos en el mundo de los vivos, tiene lugar a una escala en la que la inform�tica e internet ocupan el lugar de la divinidad comatosa. El an�lisis que de la realidad terrestre llevan a cabo los rebeldes celestiales no puede ser m�s pesimista. Los informes redactados por los arc�ngeles enviados a analizar el mundo mortal (la jerarqu�a cat�lica, el conflicto entre Israel y Palestina, el continente africano, la globalizaci�n neoliberal, los medios de informaci�n o las fuentes de energ�a) no dejan lugar a dudas: hay que empezar de cero y reescribir el G�nesis. He ah� la utop�a.

A la inteligente radicalidad de los planteamientos ideol�gicos, Talens une el experimentalismo literario. �La cinta de Moebius� es un libro �una novela, sin duda- estimulante por inclasificable. Narraci�n y ensayo. Libelo pol�tico. Parodia. Humorada demoledora. Experimento tipogr�fico. Literaturizaci�n del lenguaje de la red. Bibliograf�a sugestiva. Exponente, sin duda, de un nuevo g�nero que, como apunta la editorial jienense en la contraportada �el trabajo de edici�n ha sido muy cuidado-, podemos llamar �teolog�a ficci�n�, y que el lector verdadero no debe perderse.
 

Fuente: Heraldo de Arag�n (Zaragoza), Cuaderno de Artes y Letras n.� 210, p. 2, 7 de febrero de 2008.

Heraldo de Arag�n, 7 de febrero de 2008

 

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Manuel Talens 2008